miércoles, 27 de julio de 2011

¿Donde está la Sensibilidad?

Estos días ha surgido una nueva tragedia humanitaria, que viene a remover las conciencias más adormecidas.
Nos encontramos la imagen de desesperación y tristeza reflejada en los ojos de un niño y la impotencia de una gente que se encuentra al borde del abismo, un abismo en forma de sequía que les arroja a la mas absoluta pobreza y a lo peor la muerte.
¡Somalia es actualidad! Pero solo hasta que los mercados, las bolsas, los rescates financieros o algún escándalo político lo relegue al olvido más triste y repugnante por parte de todos nosotros, seres del primer mundo ávidos de noticias recientes.
Nuestra sociedad ha desarrollado una amnesia transitoria muy conveniente, la situación es complicada para todos, pero convendría recordar que por muy complicada que llegue a ser nuestra situación, en nuestras sociedades desarrolladas disponemos de atención sanitaria gratuita para nuestros hijos y lo más elemental el agua.
Afortunadamente para nuestros niños, nos aseguraremos de proporcionarles lo mejor, algo legitimo y necesario, algo por lo que todos los padres sean del lugar del mundo que sean luchan día tras día , una lucha, que tienen perdida de antemano los desplazados de Somalia.
Esta situación no se debe a una circunstancia puntual, de tarde en tarde a través de los medios vemos imágenes impactantes de un niño desnutrido sin esperanza de crecimiento para, acto seguido, tranquilizar nuestras conciencias aportando algún donativo de forma puntual y seguimos con nuestras rutinas olvidando el tema.
Lo malo es que el tema, son los miles de niños que nunca llegarán a una edad adulta y lo mas triste, es que ni siquiera veremos el rostro de un niño mostrando una sonrisa, por que en su mundo no conocen motivos para sonreír.